Arriba: Arbitraje argentino (ciegos,
sordos, mudos, testarudos); Nicolás Lamolina (Errador
compulsivo, creativo de penales, arrepentido); Federico
Beligoy (Ex arbitro, enemigo de Vignolo, defensor de causas
indefendibles).
Abajo: Marcelo Bielsa (Adicto a
las jogginetas y los discursos largos); Covid (Virus
del recontra hiper ortoooo); UEFA (Manga de
payasos, erradores compulsivos, AFAtizada)
Selección.
En el último antiequipo del año,
obviamente, después tendremos el antiequipo anual, pero en este tenemos casi lo
de siempre, el arbitraje como jugador titular de
esta sección. Lo que paso con Nicolás Lamolina fue
realmente lamentable. Errar es humano, pero este ya se zarpo en humanidad. El
penal es discutible por toda la confusión y ubicación del árbitro (para
nosotros no fue penal), en la Primera Nacional se han visto cosas peores, el
partido era cerradísimo y el que metía el gol se llevaba la serie. Injusto para
Ferro que hizo un campañon, y también injusto para Quilmes que tiene un
equipazo y ahora queda manchado. Hasta acá todo normal en plena anormalidad. La
cosa es que Lamolina, pidió disculpas porque después vio la jugada y vio que no
era penal. Quiso apagar un incendio con nafta y trinitrotolueno. Las disculpas
cuando ya condeno a otro año en la B a Ferro, no solo suenan vacías, sino que
al hincha de Ferro le habrá hervido la sangre a nivel lava del volcán de Las
Palmas. Calladito sos más lindo Lamolina. Pero la cosa no terminó ahí, Federico Beligoy, dueño del circo, salió a decir que
no fue penal, pero si un error importante… ah y que no puede juzgarse a nadie
por un error. Cerra la puerta que se mete el chiflón. El arbitraje champan es
así, se defienden entre impresentables. Lo único decente que hizo Beligoy en
los últimos 25 años, fue bardear a Vignolo.
Pasó la AFA y le dijo a la UEFA que no pueden ser tan mamarrachos. La impoluta
UEFA, la tan correcta y modosita, se mandó un cagadón. Claro, échenle la culpa
al software. Al Atlético de Madrid le tocaba jugar contra el Bayern Múnich,
pero el club español denunció que hubo errores en el sorteo. Hecho que fue
cierto, ya que se enfrentaban equipos que ya se habían enfrentado en fase de
grupos, cosa que no debe suceder. A sortearse de vuelta. Seguramente Arshavin
no tenía mucho tacto y no supo que bolilla era la fría o la caliente. Encima en
el primer sorteo se ponía re picante la cosa: Messi vs Ronaldo. Pero se volvio
a sortear, al Atlético le tocó el Manchester, al PSG el Real Madrid y al pobre
Salzburgo el Bayern Munich, que no perdió un solo punto en la Champions. Dice
el dueño de Red Bull, si no lo pueden sortear de nuevo, que no le gusto.
Se vino con todo de nuevo la ola de covid y pegó de lleno, también, en el futbol. En el
Real Madrid son varios los contagiados, en la Premier League casi todos, en
Portugal todos… pero como diría Lamolina padre: “siga, siga”. Porque el negocio
no se va a detener en plena pandemia. Si, algunos partidos se suspendieron,
otros no. Si hubiese pasado acá, lo hacían jugar igual, recordemos los casos de
Banfield, Sarmiento, Gimnasia con casi todo el plantel contagiado. Pero sigamos
en Europa, varios medios ya están hablando que la próxima fecha de la Premier
se va a suspender, mismo camino tomaría la Liga de España y Portugal ya
suspendió todo.
Caso curioso el de Marcelo
Bielsa. Equipo que agarra, lo pone en el mapa para luego estancarse y
después amesetarse y empezar a caer. Bueno, este último fin de semana, al Leeds
le hicieron siete pepas. Si se las metió el City que viene liderando la
Premier. No son buenos los resultados del Leeds en este año, esta penando en
16, está a 5 del último que desciende, pero el “7-0” es un resultado
“sacatécnico”. Bielsa por lo menos es sincero y franco a la hora de declarar, y
cuando le preguntaron si tenía miedo que lo raje, se despachó con discurso de
20 minutos más o menos, que en resumen dijo que obviamente este es un momento
de mierda.
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