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Arriba: Fernando Niembro (Ex rompepelotas en partidos,
empresario, travelaceassitancedependiente, casi diputado); Joseph Blatter (Casi ex presidente de la FIFA,
corrupto, grondonista); Luis Miguel Segura (Presidente
de la AFA, inútil, vago, adicto al sillón); Humbertito
Grondona (Entrenador de selecciones juveniles, inútil, chocador de
ferraris, vago, recontra vago, hijo de); Panadero
Napolitano (Pelotudo, pimientero, suspendedor de partidos); Diego Ceballos (fiel representante del arbitraje
argentino: ciego, boludo, inoperante).
Abajo: Barras brava (Mercenarios, violentos, termos); AFA (Manada de inútiles y garcas, chupadores de guita,
metástasis del fútbol argentino); Parma (Difunto
equipo del futbol italiano); CONMEBOL (Semillero
de garcas del mundo); Periodismo deportivo argentino (Manga
de veletas, exportadores de humo, militantes del humo).
Se vino el cambio con Mauricio Macri y Maria Eugenia
Vidal, porque gracias a ellos y
cambiemos nos libramos de Fernando Niembro y su constante
rompimiento de pelotas durante las transmisiones de los partidos de la
Libertadores y la Champions. ¿Por qué gracias a Macri y Vidal? Porque tuvieron
la (buena para nosotros que zafabamos de escucharlo en las transmisiones y mala políticamente para la gente del PRO) idea de ponerlo como candidato a primer diputado en la provincia de Buenos
Aires y estalló un escándalo respecto de los negocios de su productora con el
gobierno de la Ciudad. En un mundo hiperconectado la noticia estalló y durante
semanas se habló solo del tema. A Niembro no le quedó otra que bajarse de la
candidatura y desde TyC lo bajaron también. Si, TyC los mismos que tenían a
Burzaco al mando lo suspendieron a don Niembra por ese caso de corrupción, que más
o menos viene a ser como que el Gordo Valor te acuse de chorro porque te
bajaste una película por Torrent. Lo cierto es que ahora la justicia tiene que
dictaminar si Fernando es culpable o no, por lo pronto nosotros ya lo juzgamos
y lo encontramos culpable de habernos torturado con sus comentarios en los
partidos durante mucho, mucho tiempo.
Este fue el año de la caída del imperio corrupto de la FIFA.
Cayeron todos como Palacio en pleno mundial 2006 y no se salvó nadie. Ni siquiera
Joseph Blatter, a quien la Comisión de Ética de
la FIFA le pego un voleo en el orto y lo suspendió. Don Sepp gano las
elecciones con más roscas que la mecha de un taladro pero al poco tiempo tuvo
que dejar el sillón de Zúrich con una cesárea. Hoy está suspendido, el futbol
manchado y las elecciones de la FIFA ya casi están encima. Un año donde Blatter
se jubiló anticipadamente.
Luis Segura desde que asumió el
mando de la AFA que está haciendo la plancha. Un ano completamente de mierda en
la AFA. La muerte de Emanuel Ortega, pibe de San Martín de Burzaco,
desenmascaro el abandonado futbol argentino. Segura en lugar de ponerse a
laburar con todo y basar su candidatura en hechos, se rasco tanto el higo que
le salieron ronchas. Tuvo un plan para proteger todas las paredes linderas de
las canchas, fracaso y demoro más tiempo que el Keko Villalva en darse cuenta
que no fue gol. Las elecciones que no solo rozaron el ridículo, sino que chocó
de frente con la vergüenza y el asco. Segura deja el 2015 como un titular
indiscutido de este antiequipo, donde si hay que premiar lo malo, él se llevaría
todos los premios.
Otro que hizo todo tan mal fue Humbertito
Grondona, el hijo del quia. A principio de año medio que tuvimos que
cerrar el upite porque don Humbertito había logrado ganar el sudamericano. Nos despertó
ciertas esperanzas. Por ahí el tipo era idónea a pesar de ser “el hijo de”. Pero el mismo Humbertito se encargó de mandar
al tacho esa victoria del sudamericano al quedar afuera en primera ronda del
mundial. Torneo donde argentina dio más lástima que el chino que lloraba en los
saqueos del 2001. Argentina no le gano a nadie. No le pudo hacer un gol a
Austria y volvió a casa, mientras Humbertito declaraba cualquier cosa.
Irrumpió en un único partido, un par de minutos y se ganó la
titularidad en este equipo con lo peor del año. Hablamos ni más ni menos del Panadero Napolitano. Un Pelotudo a pimienta que
arruino el espectáculo de un superclásico copero. Boca todavía podía darlo
vuelta en la cancha pero este ser unineuronal apareció para cagarla toda, dando
lugar así a la hecatombe la debacle total. una seguidilla de hechos bochornosos
que involucraron a Ponzio, Funes Mori, D’Onofrio, Arruabarrena, el termo de Orión,
Fernando Niembro, Brancatelli y sus comentarios de mierda, el drone, la
CONMEBOL… Durante más de una semana no se habló de otra cosa. Luego este sujeto
diría: “Nunca imaginé que iba a llegar a esto, cuando me di cuenta me quería morir”.
Un pelotudo cósmico que ahora procesado y al borde del juicio.
¿Cómo olvidarnos del árbitro que se mandó 250 cagadones
enormes en una final? Diego Ceballos fue, en la
final de la Copa Argentina que jugaron Boca contra Central, la figura
excluyente. Le cagó la final a Rosario Central y le cagó los festejos a la
gente de Boca. En ese partido, Ceballitos fue el fiel reflejo del arbitraje
argentino: una reverenda cagada. No acertó una, ni él ni el lineman. En el único
lugar en donde la tan famosa grieta no existe es en el fútbol, ahí todos coincidimos
en algo: los árbitros son de terror.
La violencia en el ya difunto 2015 no tuvo tegua en el
fútbol, los barras estuvieron más intensos que el café veloz del
Diego. Violencia, muertes, amenazas, partidos suspendidos, barrios dados
vueltas... fueron moneda corriente en el 2015, otra vez las políticas para
detenerlos fracasaron más que la gestión del Checho Batista al frente de la
selección. Todo siguió igual y que no les parezca raro que en el 2016, los
barras vuelvan a ser titulares de este antiequipo.
Enumeramos algunas cosas de porqué para nosotros la AFA sin
ninguna duda de lo peor del 2015:
-La AFA descubrió que las canchas del ascenso son más
inseguras que un banco en el far west.
- La absurda muerte de Emanuel Ortega.
-Las lesiones de otros jugadores con los paredones linderos a
la cancha
-La eterna promesa de poner protecciones a los paredones
linderos a los campos de juego.
-El negociado que quiso hacer la AFA con Santa Mónica y las
protecciones.
-Lo termo de sus dirigentes.
-La eterna pelea Tinelli-Segura.
-Las elecciones dignas de un cuento de Stephen King.
-El vedetismo de sus dirigentes.
-Los barras.
-Humbertito
-El amorfo torneo de 30 equipos.
-Las deudas más grandes que la de Don Ramón con el Señor
Barriga de los clubes.
En el 2015 despedimos a un equipo que en los ’90 fue muy
cercano a los argentinos, estamos hablando del Parma, que se fundió porque lo manejaron
peor que a la camioneta de Chano. El club desapareció… bueno, fue rebautizado
en el Parma Football Club y arrancó a jugar en la Serie D desde este 2016.
Un dicho de hoy suele decir que si no hiciste tal cosa es
porque no tuviste infancia. Podríamos parafrasear y decir que: “si sos un
dirigente sudamericano y no estas preso es porque no fuiste presidente de la CONMEBOL”. La
Confederación Sudamericana de Fútbol fue la más diezmada en el caso de
corrupción que saltó en la FIFA. Todos los últimos presidentes fueron en cana,
Leoz, Figueredo Napout. Y además Meizsner y De Luca, quienes se desempeñaban
como Secretarios Generales. El semillero de garcas del mundo sin duda fue la
CONMEBOL. A la entrega de premios en la Copa América de Chile casi que no fue ningún
dirigente, un poco más y las medallas y los trofeos los entregaba el cadete de
la confederación.
El periodismo deportivo argentino volvió a
sus épocas de gloria, el nivel de “veletismo” rozo cifras enormes como las del último
mundial. Los hermosos cagatintas la veletearon fuerte con la Copa América y con
los Pumas. Nuevamente llenaron de humo con los mercados de pases y con lo
acontecido en la suspensión del superclásico copero. Un año de un realismo mágico
para el periodismo argentino en donde, como siempre, en lugar de informar hizo
lobby y se puso de parte de alguien.
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