Arriba: Marcelo Barovero (Arquero de
River, padre del pibe del DNI; colador); Carlos
Bianchi (Entrenador de Boca, eliminado compulsivo); Ricardo
Caruso Lombardi (Entrenador de Argentinos Juniors, vendedor compulsivo de
humo); Ramón Díaz (Entrenador de
River, goleado); Sepp Blatter
(Presidente de la FIFA, garca, puteado); Marcelo
Araujo (Relator del Fútbol para todos, boludazo, irrespetuoso); Mikael Roche (Arquero de Tahití,
maestro, colador)
Abajo: Rogelio Funes Mori (delantero
de River, crack incomprendido); Gregg
Popovich (Entrenador de San Antonio Spurs, casi campeón de la NBA); Javier Cantero (Presidente de
Independiente, inútil); Julio Comparada
(ex Presidente de Independiente, garca).
Selección
La semana empezó complicada
para Marcelo Barovero, el uno de
River venia de un buen torneo en donde había sido uno de los jugadores fundamentales
de River. Sin embargo, Lanús le metió goles de todos los colores y así River se
quedó afuera de la lucha por el título. Y otro que no la está pasando nada bien
es Carlos Bianchi. El otrora multicampeón
de Boca, ahora se quedó afuera de la Copa Argentina. Encima comenzaron las
comparaciones con la anterior gestión de Falcioni. Y sobre llovido mojado,
ahora que comenzó la “limpieza” parece que no queda casi nadie. Y encima desde
afuera, Ramón Díaz está intentando
soplar a Erviti y a Silva. Y hablando del riojano más famoso del mundo
deportivo, se quedó en las puertas del titulo. Un título con el que se alzó
Newell’s. River necesitaba demostrar que había vuelto a su jerarquía de “peleador
de títulos” pero Lanús lo bajo de un hondazo. Y para colmo de males tuvo que
soportar las críticas de los “Almeydistas”. Y ya que estamos con los
entrenadores, uno que está en el ojo de la tormenta es Ricardo Caruso Lombardi, si bien su equipo gano un partido clave
para la permanencia, Argentinos Juniors quedo en zona de descenso, ya que san
Martín de San Juan también gano. Pero eso no queda en lo futbolístico solamente
ya que Caruso Lombardi salió a defenestrar a todos los rivales del conjunto
sanjuanino. Además se mandó algo de humor negro diciendo que “Rulli parecía que
tenía parkinson atajando”. Caruso en su salsa. Y si hablamos de puteadas, a Joseph Blatter durante la inauguración
de la Copa Confederaciones en Brasil lo recontra hiper mega re cagaron a
puteadas. El mismo Blatter le restó
importancia al asunto. Imagínate si una denuncia de soborno o de corrupción le chupa un huevo, un insulto
menos. El domingo se llevó a cabo un
minuto de silencio en la cancha de Lanús por el hincha muerto la semana
anterior. Obviamente, la hinchada local hizo un profundo silencio de dolor,
pero dicho minuto se vio interrumpido por Marcelo
Araujo, al que le chupo bien un testículo y empezó a pedir los nombres de
los suplentes. Los colaboradores no tuvieron otro remedio que dárselos. Ojo, no somos mal pensados, por ahí Araujo,
acostumbrado a equivocarse, ni se enteró del minuto de silencio o que había que
callarse la boca. Mikael Roche es el
arquero de la cenicienta de la Copa de las Confederaciones, el pobre golero
tahitiano, maestro de profesión, se está volviendo de a poco en contador, de
tanto sacar pelotas. Igual desde acá bancamos a Tahití. Sus jugadores juegan
por amor al fútbol y no por guita. Cosa que en el fútbol superprofesionalizado
no se consigue.
Y parece que se nos va Rogelio Funes Mori. El incomprendido
crack millonario según trascendidos de su representante, hará las valijas y se
ira a desparramar magia y fuera de juegos a otro país. Pierde el fútbol y sobre
todo, pierden esos hinchas que se apostaban detrás del arco para agarrar las
miles de pelotas que el crack revoleaba sin sentido. Gregg Popovich, entrenador de San Antonio Spurs, estaba a unos
escasos 15 segundos de alcanzar un nuevo anillo dorado de la NBA. Algunos dirán
que su equipo pecheo, pero lo cierto es que los Heats fueron unas bestias que
eran capaces de darle vuelta el resultado a los mismísimos Harlem Globetrotters.
Pero lo cierto es que se quedó sin anillo este año. Y se fue Independiente
nomas. Un equipo sumido en el caos deportico. Javier Cantero heredo un quilombo institucional por parte de Julio Comparada. Cantero no acertó en lo deportivo y trajo mucho
veterano, de los cuales solo resultaron dos. Comparada, en cambio fue un tipo
previsor. Sabía lo del descenso y antes que los hinchas del rojo rompieran la cancha,
la destruyo él solito.
