Arriba: Barras de San Lorenzo (Preguntones, calientes por la
campaña del equipo, apretadores); Periodismo deportivo (manga
de vedetes, humeadores profesionales); Santiago Solari (Ex
entrenador del Real Madrid, usado y descartado, bombero sin agua).
Abajo: Jorge Almirón (Resistido, desvirgado de victorias con
San Lorenzo, Lunar sexy); Diego Simeone
(Bilardista, defensivo, cuestionado); Florentino Pérez (Presidente
del Real Madrid, arrepentido, le tuvo que soplar la polla a Zidane).
Selección.
La semana pasada pusimos en las cortitas, y en joda, como todo esto, que la
solución para el Real Madrid era traer a Zinedine Zidane de nuevo y a Cristiano
Ronaldo, pero a cambio no solo de dinero, sino de una fila de mamadas. Al
parecer sucedió, porque Florentino Pérez trajo
de nuevo a Zidane… Así es, la realidad supera cualquier parodia que podamos
hacer. El francés que no se había ido del todo bien, volvió por pedido expreso
del pope del Real Madrid. El mandamás merengue, se bajó los lienzos, como diría
Angelici, por el bien del “clú” y fue a buscar al ex 10 de Francia. Poco más de
nueve meses aguantó el conjunto merengue sin Zidane. Nueve meses en los que
fracasó en todo y se quedó sin dos DT. Uno de ellos fue Santiago Solari, el indiecito agarró al peor Real Madrid de los
últimos años, y obviamente mucho no pudo hacer. Hizo de bombero, pero se le
prendió fuego todo. En “reconocimiento” a querer apagar el fuego, don
Florentino ahora le ofrece volver todo atrás: es decir hacerse cargo de nuevo
del Castilla o ser el director general de la cantera. Habrá que esperar a ver
que decida.
Y si San Lorenzo ganó, pero hasta el miércoles tuvo una
semana de miércoles: Boca lo pasó por encima, lo goleó tres a cero y hasta
Buffarini que hasta hace dos partidos tenía menos proyección que el partido
humanista en las encuestas, tiró una rabona. La gente se calentó contra el DT, Jorge Almirón. El hombre del lunar, no había ganado
desde que llegó a San Lorenzo: doce partidos sin ganar, uno por la
Libertadores. Almirón pendía de un hilo. En números macro, el Ciclón no ganaba
desde el 22 de octubre del año pasado. Ah, y está último en la tabla. La
derrota en el clásico frente al Xeneize caló hondo, tan hondo que la barra se hizo presente para pedir explicaciones/apretar.
Blandi, Torrico, Gonzalo Rodríguez y Coloccini fueron los jugadores con los que
se entrevistaron los inadaptados de siempre. Ojo, también hubo hinchas posta de
esos que solo van a alentar. Pero bueno,
San Lorenzo ganó por fin con Almirón y las nubes parecen irse, pero hasta el miércoles
la paso peor que la intérprete de señas de Macri.
Goleado, humillado y ultrajado fue el Atlético de Madrid del
Cholo Simeone, que ahora debería agarrarse las
cachas. Cristiano Ronaldo lo vapuleó y demostró que al Colchonero lo tiene de
bisnieto. El Aleti viajo a Italia con una diferencia de dos goles arriba. Uno
pensaría que allá iba a ser “cuidadoso”, pero tanto arriba como abajo fue
realmente horripilante y CR7 se hizo un picnic. En España lo mataron al Cholo,
y por primera vez hay muchos cuestionándolo. Semana negra para Simeone.
Linda semanita para el periodismo
deportivo, le faltó acompañar a los barras de San Lorenzo a pedir la
renuncia de Almirón. Ni hablar con los hijos que le brotaron a Maradona. Horas,
horas y horas. El conflicto del Inter e Icardi con Wanda de bruja. El reality
show que armaron de Centurión, con panelistas especializados en comportamiento
humano analizando el pedido de disculpas del jugador de Racing. Y ni hablar del
periodismo tuitero, con una investigación digna de un premio Pullitzer por los
cruces de tuits entre Osvaldo y Jimena Barón. Y como olvidar al periodista
vedette, que destrozó a Simeone por sus dichos y no por como juega. Gracias por
el humo, periodismo deportivo.
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