Falto un solo cambio, el de Ruggeri, para que entre como Ayudante de Cambio.
La selección de fútbol de Argentina, alineada con jugadores de equipos locales puestos a prueba por el seleccionador Diego Maradona, venció a la de Panamá por 3-1 en un partido amistoso. Con un tanto de Matías De Federico, del club Huracán, y dos del goleador del San Lorenzo de Almagro Gonzalo Bergessio, el examen fue "altamente satisfactorio", aseguró el entrenador, quien destacó el interés de los futbolistas por mostrarse y aspirar a futuras convocatorias. El equipo panameño que dirige Gary Stempel afrontó el partido con soltura, carácter y una disposición ofensiva que provocó problemas a los locales para controlar el balón en la zona central del campo. Panamá, entonces, resultó el rival ideal para que la prueba fuera a fondo para los argentinos, ya que en los primeros 20 minutos generó las jugadas de ataque más peligrosas a través del creativo Barahona y los puntas Garcés y Tejada. El equipo de Maradona -que hizo siete cambios en el segundo tiempo- tuvo más tiempo la pelota en su poder, llegó con más frecuencia a los dominios del portero Jaime Penedo. Bergessio, que ya había tenido una experiencia en el equipo argentino, fue la figura de un encuentro en el que Panamá se mostró como un equipo aguerrido, que exigió en todo momento a Argentina y que hizo que la prueba tuviera sentido.
“Fue increíble, las ganas que pusieron todos los jugadores, todos querían jugar, creo que nos quedamos cortos con los cambios hechos, tendríamos que haber implementado doce cambios, todos tenían ganas de jugar en mi equipo, hasta Alejandro (Mancuso) quería entrar un toque a lesionar rivales Panameños, y ni hablar de Oscar Ruggeri, tenia unas ganas locas de entrar, no a jugar si no a sentarse al lado mío como ayudante de campo” sostiene Diego Armando Maradona. “Fue conmovedor ver como jugadores que ni conozco, como Ignacio Canuto, vestir la camiseta albiceleste y rasparse las rodillas por la camiseta, realmente esto de los muchos cambios nos favoreció mucho, sobre todo a los jugadores de los equipos chicos, que ahora subieron su cotización y tal vez la temporada que viene estén en algún equipo grande, y que la AFA se lleve porcentajes del pase mas jugosos, pero eso no es merito mío, es merito del tragaleche de Don Julio” transmite su confianza el ex Sol sin drogas. “La mayor alegría me la dio el Bichi (Esteban Fuertes) casi, casi me hizo acordar a mi partido despedida, gordo roto y duro tratando de seguir la jugada desde cerca, un orgullo realmente, una lastima que no pude llamar a Martín (Palermo) ahí la fiesta hubiera sido completa, lo bueno de este partido es que nadie se acordó de la rotura de culo que nos propino Bolivia y hasta los sobaglandes del Ole estaban contentos con el triunfo, lastima que poca gente en Capital se entero de este triunfo histórico, todo porque jugamos en Santa Fé, pero me chupa un huevo los porteños resentidos, aunque con esto no quiero decir que los porteños no sean importantes para mi, la culpa de todo la Tiene el mamavergas de Don Julio que pone y saca, como y cuando quiere” cierra Diego Armando Maradona, mientras besa su cruz colgada al cuello, al mejor estilo Lilita Carrio.
La selección de fútbol de Argentina, alineada con jugadores de equipos locales puestos a prueba por el seleccionador Diego Maradona, venció a la de Panamá por 3-1 en un partido amistoso. Con un tanto de Matías De Federico, del club Huracán, y dos del goleador del San Lorenzo de Almagro Gonzalo Bergessio, el examen fue "altamente satisfactorio", aseguró el entrenador, quien destacó el interés de los futbolistas por mostrarse y aspirar a futuras convocatorias. El equipo panameño que dirige Gary Stempel afrontó el partido con soltura, carácter y una disposición ofensiva que provocó problemas a los locales para controlar el balón en la zona central del campo. Panamá, entonces, resultó el rival ideal para que la prueba fuera a fondo para los argentinos, ya que en los primeros 20 minutos generó las jugadas de ataque más peligrosas a través del creativo Barahona y los puntas Garcés y Tejada. El equipo de Maradona -que hizo siete cambios en el segundo tiempo- tuvo más tiempo la pelota en su poder, llegó con más frecuencia a los dominios del portero Jaime Penedo. Bergessio, que ya había tenido una experiencia en el equipo argentino, fue la figura de un encuentro en el que Panamá se mostró como un equipo aguerrido, que exigió en todo momento a Argentina y que hizo que la prueba tuviera sentido.
“Fue increíble, las ganas que pusieron todos los jugadores, todos querían jugar, creo que nos quedamos cortos con los cambios hechos, tendríamos que haber implementado doce cambios, todos tenían ganas de jugar en mi equipo, hasta Alejandro (Mancuso) quería entrar un toque a lesionar rivales Panameños, y ni hablar de Oscar Ruggeri, tenia unas ganas locas de entrar, no a jugar si no a sentarse al lado mío como ayudante de campo” sostiene Diego Armando Maradona. “Fue conmovedor ver como jugadores que ni conozco, como Ignacio Canuto, vestir la camiseta albiceleste y rasparse las rodillas por la camiseta, realmente esto de los muchos cambios nos favoreció mucho, sobre todo a los jugadores de los equipos chicos, que ahora subieron su cotización y tal vez la temporada que viene estén en algún equipo grande, y que la AFA se lleve porcentajes del pase mas jugosos, pero eso no es merito mío, es merito del tragaleche de Don Julio” transmite su confianza el ex Sol sin drogas. “La mayor alegría me la dio el Bichi (Esteban Fuertes) casi, casi me hizo acordar a mi partido despedida, gordo roto y duro tratando de seguir la jugada desde cerca, un orgullo realmente, una lastima que no pude llamar a Martín (Palermo) ahí la fiesta hubiera sido completa, lo bueno de este partido es que nadie se acordó de la rotura de culo que nos propino Bolivia y hasta los sobaglandes del Ole estaban contentos con el triunfo, lastima que poca gente en Capital se entero de este triunfo histórico, todo porque jugamos en Santa Fé, pero me chupa un huevo los porteños resentidos, aunque con esto no quiero decir que los porteños no sean importantes para mi, la culpa de todo la Tiene el mamavergas de Don Julio que pone y saca, como y cuando quiere” cierra Diego Armando Maradona, mientras besa su cruz colgada al cuello, al mejor estilo Lilita Carrio.
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