Vilas merecería una oportunidad como capitán argentino de la Davis, pero aun no logro probar que se drogaba cuando jugaba.

" La Raqueta no se mancha".

El ex tenista Martín Jaite se perfilaba como el candidato con más chances de suceder a Alberto Mancini como capitán/cebollita del equipo argentino de Copa Davis, cargo para el que también se postula Guillermo Vilas. Lo informaron a la prensa local allegados a Jaite, quien acaba de desvincularse como entrenador de David Nalbandián y compartiría una dupla técnica con el aún tenista Mariano Zabaleta., lo cual transformaría la dula en una joda. La última derrota, de local ante España en Mar del Plata en noviembre, precipitó la salida de Mancini, en medio de un clima interno caliente en el equipo que se alteró incluso antes del inicio de la serie por la elección de la sede. "Circulan muchos nombres y creo que lo mejor sería que se nos consulte a los jugadores, y que el candidato a capitán nos soborne con putas y pases gratis a los telos de recoleta", comentó al respecto David Nalbandián, undécimo en el ranking de la ATP e integrante del equipo que perdió la final de Copa Davis con España.

El ex tenista Guillermo Vilas reafirmó su deseo de ser el nuevo capitán del equipo local de Copa Davis. "Vi pasar mucha gente, pero yo soy el que más esperó todos estos años. Hay que sentarse un poquito y reflexionar porque es importante no repetir los mismos errores, con gente que ya estuvo, yo merezco mi oportunidad en la selección, y quiero que Don julio lo entienda", dijo Vilas "Yo como jugador gane una copa mundial, sin embargo , Yo no estaba bien antes. Yo también a veces hablé de Grondona como excusándome. Era fácil decir que Grondona no me daba la Selección, quedaba fácil para mí que no me den ninguna responsabilidad. Hoy es otra historia, hoy estoy bien", agregó Vilas. “Tenemos material increíble como para hacer que Argentina sonría viendo jugar a la selección, Estuve 22 años en la selección, Además, en el futbol está todo inventado, los que no me quieren son los mismos que le toma la leche al gato, yo me drogue y la pague, pero la raqueta, la raqueta no se mancha” Cierra Guillermo Vilas mientras dispara con un rifle de aire comprimido y con mangueras a los periodistas que se agruparon en su quinta.