Se fue Ariel Holan de Independiente, puesto que decidió no renovar el contrato. El entrenador en una carta publicada en su twitter, dio todos los motivos que lo llevaron a decidir no seguir adelante. El principal motivo de su alejamiento fue el mal momento que sigue viviendo por aquel episodio con Bebote, lo cual derivó en una custodia policial permanente para él y su familia. Sumado a eso, personal de su cuerpo técnico, como el profe Kohan, se distanció del entrenador en la semana. “No sé si es peor la renuncia de Holan o que los violentos hayan ganado o que Guede figure como candidato  a dirigir al rojo”, se lamenta un hincha.

“Tenemos que conseguir un entrenador que convenza al hincha, a Moyano, a la barra y al APREVIDE, va a ser jodido llegar a un acuerdo pero por lo menos no nos vamos a aburrir en vacaciones”, comenta un dirigente que tiene llegada a todos. “Otra vez ganaron los barras, ya le habían ganado a Cantero, ahora a Holan, después de Bochini deben ser los que más ganaron con este club”, se enoja otro hincha. 

Se vino el receso en el futbol y con la finalización de la primera parte de la Superliga, se viene, como es de costumbre, el humo del mercado de pases. Sin embargo, con todo el bochorno de la reforma previsional, el futbol paso completamente a un segundo plano. “Esto es una cagada, tendríamos que haber hecho este proyecto de reforma en medio del mundial, no se enteraba nadie. Dormimos ahí”, comenta un diputado. “Yo vendi humo por todos lados con este tema de la reforma, los incidentes y los cacerolazos. Hice más lobby y genere más humo que un periodista deportivo”, asegura un perioidsta que la ultima vez que dijo algo verídico fue en el jardín de infantes.

Sin embargo, este acontecimiento tan detestable, ha causado una cisma, una grieta en el periodismo: el deportivo vs el político. “Estos hijos de puta de los periodistas políticos están vendiendo más humo que nosotros, así no va loco, es competencia desleal, viejo”, se indigna un periodista. “Y después tenés que aguantarte que un argentino le diga fracasado a Messi.  Que tristeza país, que tristeza. No se aprende más. No nos queremos nada, Argentina. Aguante Messi, que la Argentina me chupe la pijaaaaaaaaaaaaaa”, comenta Martí Arévalo mientras babea espuma.