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Del uno al once (Selección del Café)

Y sí, ahora estamos todos hipnotizados con el Mundial, pero que querés que te diga, igualmente hay cosas en este fútbol moderno que a nosotros, los ya no tan jovencitos, un poco nos molestan. Esa tendencia de ponderar a cualquier equipo porque ganó medio a cero y ubicarlo como “la revelación de la década”, los periodistas hablando huevadas (rescato cinco o seis en el país, y soy generoso), los que se aprovechan de la inmensa corrupción de la FIFA para decir que “ya está todo arreglado” (sin explicar en detalle lo más jugoso, cómo es en detalle ese presunto arreglo), y alguna otra cosa que no empaña el disfrute de mirar partidos hasta cansarse durante un mes. Pero algo que me viene molestando, y no es propio del Mundial, es el tema ese de los números.

Decime, ¿quién fue el cráneo que priorizó el “registro de jugadores con un único número asignado”, como si el fútbol fuera un sistema de archivos? No papá, después de tantos años, los números tienen un significado especialísimo. ¿O quién no sabe todo lo que implica ponerse la diez? ¿O la obligación que conlleva ser el nueve de un equipo? No, cada número tiene una carga emotiva, de responsabilidades históricas que no puede ser bastardeada por estos burócratas que de negocios sabrán mucho, pero de fútbol poco y nada. ¿Entenderán lo que significaba para un suplente, viendo el partido en el banco cada fin de semana con la 15 en la espalda, que un buen día le digan “pibe, el domingo vas de cuatro”? No, esos saben de contar billetes únicamente…

Ni te cuento los otros iluminados que como “brillante innovación técnica” le cambiaban el número a los jugadores. Y el “trabajo táctico de la semana” era ponerle al tres la once, al once la ocho y al arquero la cinco. Digo yo, ¿cuánto pueden tardar los contrarios en avivarse? Cinco minutos te sirve esa “estrategia”. Al segundo pique del tres por la punta izquierda, el cuatro contrario ya se avivó y lo está marcando pibe. ¡Unos chantas son los que sacaban chapa con eso! Trabajo táctico es otra cosa. Son cosas simples, practicadas y efectivas. Es el cuatro dándosela al siete, pasándole por la espalda para recibir la devolución y tirar el centro atrás, a la carrera, para la cabeza del nueve que está esperando la pelotita justo en el punto del penal porque ya ensayaron esa huevada setenta y cinco veces en la semana. Eso es laburo táctico y no chamullo.

Y ya que ahora todos los comentaristas te arman el equipo ideal del Mundial, yo te paro los once de mi equipo. Sin nombres propios, que a estos pendejos nuevos ni los juno, si duran seis meses antes de irse a Europa y encima son todos iguales con esos cortes de pelo en serie que se hacen. Con dos mangos te lo armo eh, para que los clubes que andan todos quebrados no le paguen más de cien lucas más premio por objetivo a ninguno, así después no están dependiendo de empresarios, políticos o narcotraficantes que hacen carrera. Te paso cómo armar un equipo competitivo por dos mangos. Del uno al once.

El arquero. De unos treinta pirulos. Alto, sobrio. Nada de patear penales, ir a cabecear o hacer jueguito, que muy pocos lo hacen bien y para eso está el resto de los jugadores. Que se anime a salir, y salga con fuerza y decisión a romper, en lugar de quedarse atornillado debajo de los tres palos. Nunca están de más un par de carajeadas a la defensa cuando está en babia.

Abajo. Con el dos y el seis, dos lungos. Uno veterano, rústico, lento pero firme. El otro, un pibe de inferiores, más rápido pero también más apurado, para que se vaya fogueando con el veterano. Que saquen todo de arriba, y lo que puedan por abajo. Sin hacerse los cancheros, de punta y para arriba. De dos lo pongo al viejo, que además tiene que ser fiero e imponer respeto en los tobillos rivales. ¿Ir a cabecear? Sí, pero de a uno, salvo que falten cinco y estemos uno a cero abajo. Los marcadores de punta (el tres y el cuatro): bajitos, más pibes, sin grandes recursos técnicos. Que entiendan la regla más importante de un lateral: lo primero es marcar al rival. Los laterales “brasileños” son los que saben muchísimo, los menos. A mí dame un tres y un cuatro voluntariosos, que marquen, metan, y pasen al ataque un par de veces por partido, nada más. Eso sí: ese par de veces, que sea por sorpresa y a fondo, llegando a la última línea a la carrera y tirando atrás el centro que te contaba hace un par de párrafos.

El medio. Acá se ganan (y se pierden) la mayoría de los partidos. De cinco, un animal. Un perro rabioso, incansable, petiso y morrudo. Sucio, mañoso como puta vieja, insoportable para los contrarios. ¿Habilidades? Ninguna, ya avisé que tienen que ser tobaras mis once. Recupera y enseguida viene el pase a un compañero que sabe qué hacer con esa cosa redonda. Se la puede dar al ocho, por ejemplo. El ocho va a ser un tipo inteligente. El motorcito del equipo. No corre mucho, es más, está medio achanchado. Pero el tipo sabe cuando meter un cambio de frente, cuando dormir la pelota, como devolverle una pared al diez (dentro de un par de renglones te cuento del diez), y de paso y cuando hace falta, le da una mano al cinco marcando e intentando recuperar (lo del doble cinco es una mariconeada tal que ni voy a explayarme al respecto). A la izquierda, el once. Acá meto la única variante discutida por algunos clásicos (los “clásicos” son los muchachos del bar de la esquina). Al once lo hago jugar como un ocho por la izquierda, pero yendo al fondo, porque de ese lado no tengo wing. No lo meto de delantero neto, para no dejar un agujero en el medio. Pero tampoco de “carrilero”, ¿qué carajo es eso? ¿Un jugador, un obrero o un artefacto? No papá, el once corre de la mitad para arriba, marca pero también se la juega a desbordar y eventualmente prueba al arco, que para cuidarle las espaldas está el tres, ese que tiene que subir una o dos veces por partido nada más. Me falta el enganche. El diez. Ese es petisito, morocho, preferentemente zurdo. Habilidoso, lagunero pero distinto. Gambetea para adelante, la pisa y se anima. No participa demasiado: dos o tres asistencias de esas inesperadas, dejando al compañero de cara al arquero, algún tiro libre pateado con rosca buscando el ángulo, y nada más. ¿Correr, ir al piso, retroceder con el cinco rival? Ni hablar. Para eso están los otros, los que no saben. Zapatero a tus zapatos.

Arriba. Primero el siete. Wing derecho. De pelo largo y atorranteadas varias durante la semana. Chiquito, escurridizo, habilidoso, atrevido. Casi siempre por la punta, cada tanto una diagonal. Desbordando, exigiendo, molestando y llegando al fondo. Buscando, también, la falta y mejor todavía el penal. ¿Sin mucho gol? Y sí, para eso está el nueve… el nueve es un grandote, duro, obsesionado. Vive pensando en el gol, lo que pase del área para atrás no le interesa (salvo cuando ganamos uno a cero y viene el último centro contrario, ahí quizás acepto que vaya a defender al área propia, porque ya no hay chance de contragolpe). Tiene todas las contras: es feo, rústico, burro, fastidioso. Eso sí: siempre está ahí. “Ahí” es la parte del área dónde puede llegar a ir la pelota. Es un ferviente apostador a la desgracia ajena, una especie de “fondo buitre” en la cancha: el tipo calcula siempre donde va a caer la pelota cuando el fulbá (zaguero) contrario se mande la cagada. Siempre espera la equivocación adversaria, que tarde o temprano llega. Y entonces castiga. Egoísta, busca el arco permanentemente, que para hacer goles lo ponen. Como el uno, para el nueve es la gloria o Devoto. No hay otra.

¿El banco? Con el doce, el arquero suplente, un pibe de inferiores que se viene fogueando con el titular, esperando paciente su momento. El resto, todos menos uno son pibes de inferiores, lo cual significa inversiones y no vale la pena gastar guita en matungos para que calienten el banco. El último suplente es un mediocampista todoterreno, veterano, fuera de forma e indisciplinado, pero además vivísimo, que va a entrar por el nueve cuando vayamos ganando para pisarla, conversarlo al árbitro y hacer echar a un burro de ellos además de levantar a la tribuna. ¿Técnico? Una de dos: o un pibe con hambre, dedicación y mucho estudio atrás, o un veterano vivo. Pero de esos veteranos que laburan, se ganan el respeto y miran al contrario, no un senil como Mostaza, o un cometero como Caruso o Ramón Díaz. Y de última te lo dirijo yo desde la mesa del bar, flaco. Que con este equipo me le animo a cualquiera de los rejuntados que ganan millones y salen por la tele…
Nicolás Monja

El antiequipo de la semana [Edición Mundial]

Click sobre la imagen para agrandar. 
Arriba: David Luiz (Defensor de Brasil, lagrimoso, cono); Dante (Defensor de Brasil, paquete); Marcelo (Defensor de Brasil, sachet de leche); Marouane Fellaini (Mediocampista de Bélgica, bluff, doble de Cacho de Esperando a la carroza); Luiz Felipe Scolari (Entrenador de Brasil, casi ex entrenador de Brasil, puteado); Julio Cesar (Arquero de Brasil, colador)

Abajo: Bebote (Barra, adicto a los disfraces); Alejandro Del Orte (Ex Jugador de Olimpo, imitador de paralíticos, jodón); Arjen Robben (Jugador de Holanda, crack); Marc Wilmots (Entrenador de Bélgica, mal perdedor, vende humo, contradictorio); Mick Jagger (Piedra, pedregullo, lagarto, salero, yeta, imán de infortunios deportivos).

Selección
La mitad de este antiequipo esta conformados por jugadores de la selección brasilera por obvias razones. Alemania paso por encima de la denominada “mejor defensa del mundo” —aunque no estaba Thiago Silva por acumulación de amarillas y por cuestión de espacio no pusimos a Maicon— y le hizo siete goles, más cercano a un resultado del International Soccer Deluxe que a un partido de verdad. Julio Cesar, David Luiz, Dante, y Marcelo fueron pasados como conos por todo el equipo alemán, solo falto que Neuer salga del arco y les haga un gol. A pesar de las lágrimas y los pedidos de disculpas de casi todo el plantel, la gente reacciono bastante mal y piden una renovación completa del fútbol brasilero. Brasil tenía preparado este mundial como para “olvidarse” del maracanazo de 1950, armo la fiesta, avanzaba a los tumbos (pero avanzaba) hasta que Alemania le cago la fiesta. Algo así como que Icardi te caiga en pleno cumpleaños, coma todo lo que tengas y después se lleve a tu mujer. Con todo esto, Felipao Scolari no hablo de su continuidad a pesar de haber recibido más puteadas que Domingo Cavallo en diciembre del 2001 y su objetivo ahora es salir tercero, puesto que Van Gaal ya dijo que le importaba un joraca. Brasil con esto demostró que lo suyo no es armar mundiales, no por la infraestructura y eso, sino que es como los dueños de un salón de fiestas, organizan la fiesta pero se divierten todos menos los dueños. Chiste que tiene más años que el fantasma de 1950.

Antes del mundial todos hablaron sobre la supuesta gran revelación que iba a ser Bélgica con Marouane Fellaini a la cabeza. Sin embargo el equipo fue bluff y la verdadera revelación fue Costa Rica. El sábado pasado —por todo lo que paso en una semana parece que fue en el mundial del 94— Bélgica se enfrentaba a la Argentina y antes del partido se habló de este señor der rulos parecido al personaje de Cacho hecho por Grandinetti en “Esperando a la Carroza” y jugó casi, casi de la misma manera. El ex rulón —ya se cortó el pelo— fue una brisa en el Egeo, parafraseando a Fantino y no jugo a nada. Argentina gano el partido uno a cero, ante una Bélgica que tenía menos ideas que Jorge Bucay haciendo “Copy/paste”, pero el colmo del caso fue que Marc Wilmots, el entrenador belga dijo que Argentina es un equipo “común y corriente” y que si él plantaría el equipo así, en Bélgica la prensa lo mataría. El tema es que Bélgica a la hora de jugar genero menos peligro que Claudio María Domínguez empepado.

Volvió Bebote a la Argentina, bah lo deportaron y aprovecho para votar en las elecciones. Luego dio una extraña conferencia de prensa, si una conferencia de prensa donde asistieron una multitud de periodistas para escuchar al barra con un amplio placar cargado de disfraces. Conto que la entrada para los partidos del mundial se la dio el Contador de Grondona, cosa que nosotros descreemos ya que el contador de Don Julio debe trabajar unas 23 horas al día contando plata y haciendo ingeniería tributaria para que Grondona eluda y evada tantos impuestos como pueda. Lo cierto es que Bebote cada vez le dan más y más cámara; y ese cambia y camia de disfraz.  Uno no sabe si reír, llorar, indignarse o prender fuego la AFA.

¿Se acuerdan de Alejandro Delorte? Volvió en forma de discapacitado. No, no sufrió ningún accidente, ningún padecimiento, nada. Lo suyo se debe a lago común en muchas personas: Boludez atómica. El ex delantero de Olimpo, consiguió entradas de su amigo, Rodrigo Palacio y se fue para la cancha como corresponde. Hasta ahí todo normal, el tema es que consiguió una silla de ruedas y así pudo entrar al VIP del Arena Corinthians. Según sus amigos fue una joda y que Delorte suele hacer este tipo de bromas.  Y si, el olé título “Estuvo para Delorte”

Que decir de Arjen Robben. Mascherano lo anulo y Rojo le hizo un caño. En la única aclara que tuvo Mascherano lo cruzo justo. Después del caño de Rojo debería retirarse a una campiña holandesa a plantar tulipanes y a replantear toda su vida. Durante el partido simulo todo tipo de falta. Se tiraba por cualquier cosa, solo le faltó simular un embarazo como hacen en las novelas. Luego del partido fue a consolar a su esposa y a su hijo que lloraba en la platea, también pobre pibe, después de ver el caño que le hizo Rojo a su papá se traumo.

Mick Jagger asistió al partido en el que Alemania aplasto a Brasil. La cosa fue que el Stone fue a alentar por Brasil y tal como sucede con todos los equipos. Al otro día se mostró con hinchas holandeses y Holanda se quedó afuera. Si llega a querer alentar por Argentina, esperemos que lo sienten al lado de cierto colorado que quedó eliminado del bailando el mismo día que termino una novela que le ganaba siempre en rating. Más que anular mufa con mufa, implosiona el estadio.

Un clásico mundial: Pagani sacado. Invitado especial: una cebolla.

Ayer publicamos una de las rabietas de Horacio Pagani al aire, pero falto una  parte, no por ello menos bizarra. El bueno de Horacio empezó a los gritos con una cebolla en la mano y atendio a todos, a Palacios, a Van Gaal., a todos. Solo le falto pegarle a Pelé, Havelange, Blatter, Elton John y al Papa, como Armando Samarbide en el "depOrtivo". Porque si hay alguien que tiene los huevos más granes que Mascherano, ese es Pagani, porque lo tiene inflados por el resto de la humanidad.

Video extraído del canal de drkhumalo

Duelo de titanes.

Como todos saben, Mascherano fue puro huevo contra Holanda y no permitió que Robben pueda rematar ese tiro del final, valió mucho más que un gol. Por ello en seguida la web se lleno enseguida de las "máximas de Mascherano" o "Maschefacts", emulando así a todas las máximas que tenia Chuck Norris, algunas fueron del mismo ex alumno de Bruce Lee, solo que cambiaron el Chuck por el Masche, pero lo importante es que Mascherano en la cancha es como Chuck Norris o Chuck Norris es como Mascherano en Walker Texas Ranger.

El análisis de Argentina 0 (4) - Holanda 0 (2)

Por el nene Sanfilippo (*)
Ganamos y estamos en la final ¿Hay que analizar algo? Siempre hay algo para analizar porque son todos una manga de hincha pelotas. Lo importante no es que le ganamos a Holanda. Pero claro mi viejo, Holanda era secundario. Lo importante es que le ganamos a todos esos mufas. A esos yetas que suelen florecer en plena etapa definitoria de los mundiales. Porque la mufa nos afecta a todos. Por más que hagas dos millones y media de cábalas, siempre aparece el mufa que viene envuelto en un halo de yeta a cagarte el día.
Estos esperpentos te gritan el gol antes y la pelota termina en cualquier lado menos adentro del arco. Habría que vaciarle el cargador de una glock a estos hijos de puta, pero no un cargador de balas, sino uno con dientes de ajo. Manga de lagartos. Ya tengo el testículo izquierdo como esas pelotas de goma espuma de tanto apretarlo, ante la aparición de estos indeseables. Así como uno se compra esas pelotitas de goma espuma para apretarlas con una mano y sacarse los nervios, yo me apretó el huevo izquierdo para sacar a los mufas. Pero nunca falta el mufa que le diga a uno que es mufa. Así como están la categoría de boludos, también está la categoría de boludos:

·         El mufa consciente: Sabe que es mufa pero se calla la boca.
·         El mufa útil: Es el menos peligroso de todos. Sabe que es mufa y por eso empieza a decir cosas como “Alemania no se te puede escapar, ya son campeones”. Usa su poder para mufar al rival.
·         El mufa predictivo: Te grita el gol o dice “que golazo” ni bien el jugador le pego al arco. A ese mufa hay que exiliarlo.
·         El mufa  descreído: Es el que no se hace cargo de su mufa. “¿Qué voy a ser mufa yo? Si llegue alto en la vida, soy gerente, tengo una mansión, etc.”. No maestro, una cosa es ser un miserable y un perdedor y otra cosa es ser mufa
·         El pelirrojo: No todos son mufas, es como la sal, tarde o temprano te caga la vida pero no te das cuenta.  
·         El mufa optimista: Es el peor, porque en su afán de caer bien en el grupo empieza con cosas como “¡Hoy ganamos!”; “Le vamos a meter tres a Alemania”; “Tenemos al mejor del mundo que es Messi”. Después perdemos, Müller alcanza el record de goles de Klose y Messi termina internado por apendicitis.
·         El mufa político: Al igual que los políticos, solo se presentan cuando hay algo importante. Si hay una final esta esté esperpento con su camisetita, su gorrito y su vuvuzuela, porque es hincha de la selección desde que se enteró que estaba en la final. Estos especímenes suelen ir a la cancha cuando su equipo está por salir campeón, solo con el ánimo de ir y cagarle el campeonato con su mufa al equipo de sus amores.
Hay muchos más pero tengo que analizarles el partido mi viejo. Lo importante es eso, que superamos la barrera de los mufas, ahora podemos hacer cualquier cosa, pero hay que tener cuidado.

Dicen que el partido fue un juego de ajedrez y a Sabella que siempre le encanto convocar a algún que otro caballo, le vino bárbaro hacer tablas. Pero claro, le ganamos a Holanda por penales y están todos prendidos del escroto de Sabella. Que Sabella lo gano desde el banco, que la madre Teresa de Calcuta al lado de Sabella es Cruella de Vil… Si Romero no atajaba esos penales, hoy Sabella tenía peor imagen que Annalisa Santi reclamando la vuelta del “Duce”. Mire como son las cosas que no hubo tanto viento pero acá los veletas giraron como loco.

Fue un partido donde el que se equivocaba perdía, y no se equivocó nadie, salvo Van Gaal en no mandar al gemelo descaderado de Nicolás Cambiasso a atajar los penales, mejor, le cabio, como dicen los chicos ahora.  El que se comió la cancha fue Mascherano. Robben tendría que consultar a algún especialista en cirugía de siameses, para ver si puede despegarse a Mascherano.

Uno por uno.
Sergio Romero (9) Cada cuatro años sucede un acontecimiento que ni los científicos de la NASA puede explicar: Cada cuatro años a Romero le crecen manos. Yo a Romero lo critique, antes del mundial, durante el mundial y hoy puedo decir que me cerró la cola con un supositorio de carne.  Cada vez más cerca de que cambie de club ¿Se va del Mónaco? No, se va de Guercio a Rihanna.

Pablo Zabaleta (6) Proyecto bien y su clausuro bien su sector. Casi queda con menos dientes que pelo, pero aun así siguió adelante.

Martin Demichelis (6) Sigue ordenando la defensa. Tuvo que marcar a Van Persie y ahora tiene que marcar a su mujer que está saliendo en todos los programas de TV de Brasil.

Ezequiel Garay (6) Firme y duro como pelo de Fellaini. Hizo su penal y como Don Julio: gano siempre  de arriba.  

Marcos Rojo (-) No le puse puntaje. Ya excede todas las calificaciones. No sé, denle una medalla al mérito, las llaves de la ciudad o el trono de Holanda. ¿Saben porque Mascherano puso tantos huevos? Porque tenía al lado la seguridad de contar con Rojo en el equipo. Cuando le tiro el caño a Robben apague la televisión, con ese caño yo ya salí campeón del mundo.  Años de terapia para Robben.

Lucas Biglia (6) El Robín de Mascherano, el niño fisión de Masche. Estuvo al lado y colaboro más que Juan Carr con red solidaria. Tampoco le tenía fe a este tipo.

Javier Mascherano (10) Lo anulo a Robben y le robo la pelota a media Holanda y hasta le robo las máximas a Chuck Norris.

Enzo Pérez (8) Fue una de las figuras del encuentro, si yo sabía que los ex pinchas iban a rendir tanto hubiese hinchado las pelotas para que citara a Carrusca, Albil, Desabato…

Lionel Messi (?) La última noticia que tuve de él fue que lo secuestraron Daley Blind y Nigel de Jong. Espero que este bien.

Gonzalo Higuaín (5) Tuvo pocas situaciones y se dedicó a pivotear.

Ezequiel Lavezzi (5) No gravito demasiado y tuvo que ocuparse de marcar. El nuevo club de Fans de Mascherano le saco un 25% de pendejas calenturientas.

Rodrigo Palacio (5) Tuvo poca participación. Fallo un gol increíble. En este partido tampoco se le aflojo el chupón con el que tiene pegada su trencita.

Maxi Rodríguez (5) Entro en los últimos minutos pero no pudo hacer mucho. Metió su penal. Los mejicanos no sabían si putearlo a él por lo del 2006 o a Robben por lo de hace semanas atrás.

Sergio Agüero (4) Pesó en el partido lo inverso proporcionalmente al peso de las chicas que suele comerse.   
 (*) No pibe, no se coma el amague, no es el Sanfilippo de verdad, es una parodia, avíspese. 

¿De qué te ponés contento?

 Yo la verdad es que no te entiendo Cacho, la verdad que no te entiendo. Ni a vos, ni a todos aquellos que van a una cancha. O a esos hincha...


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