Primer
Puesto: Franco
Niell (jugador de Rosario
Central, Petiso, goleador en partidos en partidos importantes, elegido en el
2009 como icono gay del fútbol argentino)
Segundo Puesto: Julio Grondona (Garca eterno, 35 años, presidente vitalicio de la
AFA, corrupto sin fecha de vencimiento)
Tercer Puesto: Carlos Reinaldo “Mostaza” Merlo (Entrenador de Racing, ídolo, putañero,
fiestero, adicto a la carmela)
Fue un fin de
semana donde se jugó otro Superclásico, el siempre explosivo clásico rosarino;
uno de los más coloridos del mundo. En
un partido de ida y vuelta donde ambos arqueros se lucieron, fue Franco Niell, el petiso delantero que marcó el gol del
triunfo ni bien iniciado el segundo tiempo. El enano es de meterla cuando las
papas queman, sino pregúntenle a los hinchas de Gimnasia cuando dio vuelta una
promoción impensada. Niell, una especie
de Frodo del fútbol. El chiquito que fue elegido como icono gay del fútbol argentino en el 2009, volvió a meterla en un partido importante. La ley de la “ele”
comprobada.
Usted se
preguntara: ¿Qué carajo hace Grondona en un podio
nuestro? La cosa es que este Sauron con anillo del “todo pasa” llego a los 35
años de mandato ininterrumpido en la AFA. Ni siquiera Al Capone al mando de la mafia duro tanto tiempo
como el ferretero de Sarandí. Supero por más de dos años al papa que más estuvo
en el sillón de San Pedro. Todo un record,
el de don Julio. Porque hay que tener cintura para adaptarse a 11
gobiernos diferentes (4 de ellos de facto), donde siempre cayo parado y con
guita en la mano. Amaso una fortuna y tiene más poder que Heman y su espada de
Grayskull. Es la Mirtha Legrand de los dirigentes del fútbol. Una trayectoria de corrupción envidiable por cualquier aspirante a
mafioso. Un modelo de garca inagotable, a imitar por generaciones futuras de dirigentes corruptos. Bien por él, mal por el fútbol.
La sorpresa la
pego Racing al “bajar” a Vélez Sarsfield en esta fecha. Si bien Racing cuenta
con un plantel de jugadores con buen pie; el partido que le gano a Vélez fue
gracias al tipo con carmelazo que tenía sentado en el banco: Carlos Reinaldo Merlo. Es conocido la “debilidad” de
Merlo es el sistema defensivo. Esa estrategia funciono a la perfección en
Liniers, ya que el “Turu” Flores sobre
el final puso más jugadores arriba que el VIP de Esperanto. Merlo estaba
más que conforme con el empate pero metió a Vietto adentro. Gano Racing,
salió del último puesto de la tabla y parece que Merlo le gano a la camarilla.
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