Primer Puesto:
Lionel Messi (Crack, rompedor de records en el fútbol español, rompedor de
nalgas de Cristiano Ronaldo, genio, si no llega a ganar el mundial también
quebrara el record de puteadas recibidas)
Segundo Puesto: El Seguridad de River (Amante de los niños, sin reflejos, lento, arquero
frustrado)
Tercer Puesto: Sebastián
Saja (Arquero de Racing, buen compañero, gran jugador, figura, ex camarillero,
ex sajarrucho)
¿Qué decir de
Lionel Messi? El jugador rosarino la volvió a romper en un derby español. Si, está
bien, tenes razón: metió dos de penales pero genero más juego que Marley en un
horario vacante de TELEFE. Lio brindo asistencias, jugo como un verdadero crack
y todos hablan de él. En su “duelo” con Cristiano Ronaldo, le paso el trapo por
todos lados y el otro crack del Real, Gareth Bale desapareció de la cancha. Si está
bien, volves a tener razón: el “duelo” con Cristiano casi que no existe —en más
de una ocasión ambos jugadores sostuvieron que esa “enemistad” se la pusieron
los medios y no ellos— pero como cada
uno es un icono de su club, la “competencia” siempre existe. Ah, encima rompió
dos records: el de mayor goleador en un clásico —superando a Di Stefano— y supero
a Hugo Sánchez como segundo goleador histórico en la liga española. Esperemos
que nunca rompa el record de puteadas por no ganar un mundial.
Hecho insólito en
River, un chico entro a la cancha en pleno partido y volvió locos a los de
seguridad y los policías. Últimamente los pibes entran con suma facilidad al
campo de juego millonario, parece que es
más fácil a que un futbolista entre a Esperanto. Lo cierto es que el pibe
intentaron agarrarlo y fue cuando un enorme tipo de Seguridad se tiró para
agarrar al nene como si fuese Goycochea atajando un penal en Italia ’90. El
tema es que fallo y quedo en ridículo y las tribunas se lo hicieron saber con
un lacónico “Oleeeeeeee”. Luego al niño lo iba a agarrar un policía.
Sebastián Saja pasó
de ser un mercenario, serruchatecnicos a ser el “sostén” de la segunda victoria
de Racing en este torneo. Al arquero en la semana lo habían acusado de “Sajarrucho”,
esto es de complotarse con compañeros para desestabilizar a Merlo. Pero el
arquero fue figura del partido que Racing le gano a Belgrano y le dio oxígeno a
Merlo. Saja no solo tapo pelotas, sino que tapo varias bocas y un par de culos.
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