El análisis de la fecha 25. Superliga 2017/18. Primera parte.
Se no terminó la no fecha 25. Una fecha donde la figura fue el asteriscos. De
antemano sabíamos que Estudiantes contra River se postergaba para el 10 de
mayo, porque el Pincha pidió postergarlo y a River le vino bien. El sábado, ya
domingo por la madrugada se cayó el cielo. Un temporal más fuerte que Sol Pérez
en calza o que Cristian Sancho en zunga, porque acá hay que ser inclusivos. Había
parado un toque y Tello decía que se jugaba, luego entró a hablar con los
actores, salió y dijo que no se jugaba porque si seguía lloviendo, o si
Guillermo empezaba a llorar, la cancha no iba a aguantar. Se dijo que no se
jugaba porque Boca prefería guardar a sus jugadores para el partido clave
frente a Junior. A otra cosa. Al rato nos enterábamos que se suspendía Racing
vs Arsenal. Lo supimos seis horas antes de que se jugara… la cosa es que en
Avellaneda no llovió con fuerza desde las 13/14 hs. Se dijo que lo hacían para
que Racing preservara la cancha de cara al partido por la Copa. Si todos esos
rumores llegan a ser ciertos, la conclusión sería que la Superliga les chupa un
huevo a todos. Ya fue, cierren la Superliga y que se juegue cuando no haya
Libertadores.
(*) No pibe, no es el Nene posta, no se coma todos los amagues.