El antiequipo de la semana.
Arriba:
Árbitros (Inútiles, dispares, garcas, ciegos); Futbol Para Todos (Distraídos,
sotas); Claudio “Chiqui” Pérez (Jugador de
Belgrano de Córdoba, goleador, salvador, cuñado e’ tigre).
Abajo:
AFA (Manada de mafiosos, egoístas, inútiles,
mamadereadores profesionales); Sergio Jadue (Casi
ex presidente de Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile, futuro
procesado, estresado); Lluvia (Rompepelotas,
suspendedora de partidos).
Selección
Luego de la
tormenta que generó Diego Ceballos sobre el arbitraje
argentino, las polémicas siguen más fuertes que Ivana Nadal en tanga.
Ahora el SADRA como la AAA se están agarrando de las mechas cual vedetongas en
pleno verano. Guillermo Marconi, titular del SADRA salió a matarlo a Ceballos.
Que un tipo como Marconi le pegue a Ceballos a uno le dan ganas de ponerse del
lado de Ceballos o hasta de Codesal, si le pegase a este. Juan Carlos Loustau
lo paró en seco, si el Pichi Loustau, otro impresentable mas en esta orgia de árbitros
impresentables. A todo esto, la AFA comandada por el inútil de Luis Segura dio de
baja a Ceballos como árbitro internacional. Pero el presidente de la AFA lo
hizo pensando en Central ¿De bueno que es? ¿De justiciero? Nah, lo hizo
pensando en el voto, voto que Central estaba amagando a negarle si no hacía
algo con Ceballos. Mientras del lado de Tinelli, plantea hacer una especie de lista
de Schindler pero de árbitros, en la cual estarán solo aquellos que sean idóneos.
De capacitación y de unificar criterios ni a palos. Dos candidatos que no
convencen a muchos, pero que uno representa el mal menor y un cambio… esto nos
suena de algún otro lado. ¿Cómo va a terminar esto? Con Ceballos parado por un
rato, luego lo mandaran a dirigir a la B Nacional, como si los equipos de la
segunda categoría tuviesen la culpa de algo. Más que un castigo para Ceballos
es un castigo para los equipos del Nacional B.
Mientras en el
partido entre Independiente y Vélez hubo un polémico penal a favor del Rojo,
penal que otra vez despertó las polémicas. Si bien la acción es interpretada
por el árbitro, en la Argentina los criterios son tan dispares que uno te cobra
penal, otro no cobra nada y otro por las dudas lo raja de la cancha a Caruso
Lombardi. Lo importante es que la AFA está muy ocupada tongueando y rosqueando
de cara a las elecciones de diciembre… esto también nos suena de otro lado.
La última fecha, más
precisamente en el partido entre Rosario Central y Boca, tuvo más espectadores
que cualquier fecha anterior. Claro estábamos todos los morbosos viendo que iba
a volar por los aires. Con tanta expectativa todos pusimos el partido y paso.
No, no voló nada por los aires. Pero los de Central colocaron banderas contra
la AFA. Una pavada comparada con las banderas en homenaje a un miembro de “Los
Monos”, pero eso es otro tema. Vayamos al hueso, como diría Orión antes de
salir del arco. Banderas como “AFAnar es violencia” o “AFA corrupta” se
hicieron ver por todos, salvo para el Futbol Para Todos. Bah, en realidad si la mostraron pero desde muy lejos, tal como nos señala el lector Demian Urizar en los comentarios. La cosa es que no tocaron mucho el tema y tambien se "morfarón" cuando el hincha de Central lo increpó a Arruabarrena y le dejó un regalito. Si salió en el programa "Fútbol Permitido" de la misma TV Publica. Sí, es una boludez, pero con esa boludez se hicieron los sotas. No la mostraron
lisa y llanamente. No era una bandera ni en contra de Scioli, ni a favor de
Macri ni en blanco a favor de Del Caño. Encima el partido estuvo parado por
dichas banderas… Los que saben dicen que fue por “incitación a la violencia”
porque las letras de “AFA” estaban con los colores de Boca. Habría que probar y
mandar un telón de AFA con los colores negros y a ver si lo paran ¿no?
Claudio
“El Chiqui” Pérez se
convirtió en héroe, pero no para la gente de Belgrano, sino para la gente de
Huracán. Su gol le permitió conservar la categoría al globo y la gente misma de
Huracán, comenzó a cantar: “Para el Chiqui Pérez, la selección ♪”. Y un gol en contra no es nada del otro mundo,
una fatalidad que puede pasar en cualquier partido. El temita es que el
grandote ex Boca está representado por Mauro Bianchi ¿Y? Mauro tiene una
hermana, Brenda, quien está casada con Eduardo
Domínguez. Claro, eso levanto más suspicacias que Blatter al frente de la AFA.
Mirando el gol, una y otra vez todo indica que el autogol lo hizo de bruto, de
bestia, de rustico, de escombro que es. Como decimos siempre en estos casos:
queremos creer que lo hizo porque tiene los pies redondos y no para beneficiar
a Huracán. Y si no también habría que mirar para el lado de Temperley contra
Argentinos Juniors que la última vez que patearon al arco en ese partido,
Mirtha Legrand de pequeña había adoptado un triceratops como mascota.
El presidente de
la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile, Sergio
Jadue, parece que anda más cagado que baño de Constitución por el temita
ese del FBI y de la FIFA. Si bien no hay nada formal todavía, las sospechas se
agrandan más que papada de Aguilar. El weon de Jadue se tomó licencia por
enfermedad. Al parecer tendría muchos dólares… eh, dolores por todo ese
quilombo del FIFA Gate y anda estresado. Se sospecha que recibió un vuelto de 3
millones de dólares por la televisación de la Copa América pasada. Lo cierto es
que Jadue pidió licencia y se tomó el palo. Pero los quilombos no terminan ahí,
porque al parecer el que se iría también es Jorge Sampaoli si es que Jadue definitivamente
se va.
La
lluvia parte de inundar
muchos barrios y de mostrarnos como los
votantes de Scioli y los de Macri se tiraban con inundados, nos privó de ver el
partido entre la Argentina y Brasil. El cual se pospuso [NdeR: al cierre de este antiequipo aún no habían jugado].
El diario brasilero Lance! Puso en su titular que Argentina sentía miedo,
en un juego de palabras con el cantito de “Brasil decime que se siente”. Claro,
acá lo levantaron por todos lados y muchos se indignaron. No nos llama la atención
porque el Lance es el Olé de Brasil. Dos termos de tinta y papel. Si
rememoramos, el Olé llego a llamar “macacos” desde una tapa bastante cabeza de
tacho. Una guerra de diarios termómetros.