Por el relator
militante (*)
Buenas tardes
compañeros. Estamos otra vez aquí para llevarle la alegría a los corazones que
es el futbol para todos. La alegría del pueblo. La alegría de saber que los
goles son de todos y no de unos profetas del mal que una vez los escondieron.
En esta fecha hubo ganadores y perdedores, pero todos se fueron contentos bajo
el sol peronista que salió luego de tanta lluvia, tanta lluvia que seguramente
eran las lágrimas de los gorilas que no paran de llorar por todas las
conquistas de este gobierno popular. Mire como festeja Matos su gol, el gol del que quiso aprovecharse la derecha
golpista encarnada por Buffarini. Celebre Matos, celebre esa conquista suya,
esa conquista del pueblo de San Lorenzo. ¿Monopolios o democracia? Esa es la
cuestión. Hay dos punteros, Boca y River lo que demuestra la inclusión de este
proyecto. Además en el campeonato tenemos al campeón de América, River Plate,
el éxito de la integración latinoamericana. ¿Picado fino o picado grueso? Esa
es la cuestión. Ya empieza este resumen, este resumen del futbol para todos que
lleva en sus oídos la más maravillosa música que es el cantar de las hinchadas.

Aluvión de goles
en el Amalfitani. Cuatro gritos de alegría, de fiesta nacional y popular. Y
encima repartieron puntos. La inclusión de puntos. Así como la juventud copa
las calles y la política, el piberío copo Vélez y Matias Acuña puso arriba a
Vélez. Muchos errores tuvo Vélez, errores que los medios hegemónicos no te
muestran pero nosotros si, por esos errores empato Rafaela con gol de Franco
Jominy, el Jominauta. Alegría en las calles, es la fiesta popular de este
partido. ¿Bolognesa o Filleto? Esa es la cuestión. Pero Vélez es como el
pueblo, y no se iba a rendir porque apareció Yamil Asad para poner el 2-*1 y
desatar la fiesta popular en las tribunas. Pero Osmar Ferreyra pondría el empate.
La igualdad y la inclusión en un partido que fue una victoria frente a los
agoreros del mal.
No hubo alegría
en el Parque de la Independencia. Los fondos buitres defensores no dejaron que
el clamor popular del gol se manifestase.

Volvió Carlitos,
volvió el jugador del pueblo y la alegría es del pueblo. Alegría que no nos
podrán quitar. Que florezcan mil flores y que florezca la alegría. Grande
Carlitos, también lo gritaban en los 90 con la feroz cachetada neoliberal. Y
ahora también gritan pero no podrán frente a esta victoria del pueblo, el
jugador del Pueblo, Carlitos, el Teveznauta. Y gano Boca, el primer gol lo hizo Pérez, dándole
la alegría inmensa al pueblo boquense. Felicidad, algarabía ante la sombría
expectativa de los gorilas. Ni un paso atrás compañeros. ¿De carne popular o de
pollo elitista? Esa es la cuestión. Boca de la mano de Carlitos iba a seguir
yendo al frente, conquistando con coles, como las conquistas sociales que el
pueblo ha ganado. Y llego el segundo. Calleri, gracias a una magnifica intervención
del Carlitosnauta. Descontaría Arsenal para alegría de algunos oligarcas.

River venia de
varias conquistas latinoamericanas, como la Sudamericana y la Libertadores. Le demostró
a Japón que el proyecto no sabe de fronteras y ganó la Suruga Bank. Alegría y
jubilo en el pueblo millonario. Millonario de afecto, de fiesta. No como otros
millonarios golpistas que buscan desestabilizar desde los medios hegemónicos.
En frente estaba San Martin de San Juan, que gano con gol de Pumpido. Pero la
fiesta no termino con esa derrota, porque la fiesta del pueblo dura en los
corazones de todos nosotros y esa alegría los agoreros no nos la podrán quitar
los fondos buitres.

Gano Quilmes, a
pesar de la campaña sucia que está sufriendo el compañero Aníbal Fernández gano
y le demostró la voluntad popular de los jugadores cerveceros. En frente estaba
Rosario Central, un conjunto que viene luchando alto como las banderas de la
justicia social. Empezó ganando el canalla con gol de Marco Rubén, el
rubenauta. Todo era alegría pero aparecería Emanuel Morales y Alan Alegre para
poner el 2-1 ¿Y cómo no estar alegre con toda esta inclusión? Tristes y sombríos
estábamos en la década nefasta con las políticas neoliberales. Bieler puso el
3-1 final para que la alegría sea del pueblo cervecero.
(*) Cualquier similitud con algún personaje de la realidad es una choriplanera coincidencia.