
Por el Nene (*)
Ya paso el primer
partido. Se ganó y punto viejo. Tampoco caigamos en la clásica impaciencia
criolla, viejo. Ya están los agoreros que empezaron a decir que así no, que dan
asco, que en octavos nos volvemos. Si hiciéramos un mundial de pelotudos
seriamos más rápido que los delanteros holandeses mi viejo. Pero claro, cada
cuatro años hay que fumarse a los boludones que se transforman en “futboleros”
por el mundial. Gente que lo más cercano que estuvo a un balón fue a un balón
de cerveza en un after office. Eso es lo malo del mundial mi viejo. Opinan
todos. No está mal que opinen todos, pero el mismo pelotudo que sale a tirar
petardos porque le ganamos a Bosnia, es el primero en la fila para putear a
Messi si no salimos campeones. Lo mejor que le pudo pasar a la selección es
empezar así. Jugando por momentos como el orto, dejando huecos en la defensa.
Ir de menor a mayor, así de cayetanos. Que los candidatos sean otros, Alemania,
Costa Rica, Holanda o Italia. Porque el “pelotudo mundialista” ya en el primer
partido quiere salir campeón y con el partido de ayer hincha un poco menos las
bolas. Capaz que le metíamos cinco a Bosnia y este espécimen caía a la oficina
o al negocio que atiende con un gorro arlequín albiceleste. Porque el boludo no
sabe de límites. Este prototipo está esperando todo de Messi: que se mande una
cagada para putearlo de arriba abajo o que meta un golazo para lustrarle el
ganso con elogios desmedidos. Y bueh, así es el futbol. Hay que lidiar con la
terquedad de Sabella, con la manada de inútiles que tenemos en el fondo, con la
ciclotimia de Messi, con las fotos boludas que te cuelga el pocho Lavezzi, con
los boludos que uno tiene al lado del televisor preguntando cuando vienen los
goles, con tu señora y tus cuñadas gritando los goles de la repetición, a los
amigos de tus pibes poniéndose en pedo desde la previa del partido de Costa de
Marfil contra Japón, etc, etc, etc. Por suerte pasa una vez cada cuatro años,
sino los huevos los tendría más grandes que las orejas de Di María.
Sergio Romero (6)
Junto con Sabella y los muertos que tenemos en el fondo, es uno de los más
cuestionados del equipo. Pero respondió y bien. Le metieron un gol por no
cerrar las piernas a tiempo. Si no son las piernas, son los brazos.
Pablo Zabaleta
(6) Me preocupa, se esta quedando pelado y no tiene ni 30 años. Para evaluar. Futbolísticamente
rindió.
Hugo Campagnaro
(5) Esperaba más de él, como que colgara a un rival o alguna patada al pecho de
Dzeko.
Federico Fernández
(-) Todavía no ubique quien es, la próxima que salga vestido con la camiseta
suplente, como los líberos en el vóley, como para identificarlo nomás. Casualmente
tambien jugo de libero.
Ezequiel Garay
(5) Flojo por momentos y por momentos un flan.
Marcos Rojo (10)
Autor intelectual del primer gol, se mandó una rabona en un rechazo. Mucha
magia para el maracaná. Jamás pensé vivir para ver algo así, fue como ver a Jimi
Hendrix tocar la guitarra prendida fuego. Ya no quiero ver más fútbol, ya lo he
visto todo.
Maxi Rodríguez
(4) Un solo disparo desde lejos que se fue desviado. Estuvo más desconectado
que la heladera de un supermercado chino por las noches de invierno.
Javier Mascherano
(5) Por momentos distribuyo peor que JR de delivery. Recupero varias pelotas,
algunas con falta. No mucho más.
Ángel Di María
(5) Otro que desapareció en la cancha. Por ahí se fue de gira como Leito o como
Peter la Anguila y a la selección cayó en su remplazo uno de esos. Con todo el
ruido que hizo la hinchada argentina y esas orejas captando todo, se habrá
quedado sordo el pobre.
Lionel Messi (6)
Un primer tiempo para el olvido. Lo marcaron de a diez. No pasó desapercibido
porque cuando jugaba mal algunos lo buscaban para putearlo, cuando hizo el gol
lo buscaban para salivarle el escroto a elogios.
Sergio Agüero (6)
Algunos malintencionados dirán que Karina le comió piernas o la cabeza o que
simplemente comió.
Gonzalo Higuaín
(10) Participo en el segundo gol tocándola bien con Messi. Pero le pongo un 10
por el nivel de minas que se viene comiendo.
Fernando Gago (6)
Distribuyo bien la pelota, ya puede jugar un tiempo sin caer en una camilla,
bien por él.
Lucas Biglia (-)
Entro faltando tres minutos como para justificar el viatico.
(*) No pibe, no se coma los amagues, no es el nene posta, es una parodia.