/* */ /* */

Slider[Style1]

Style2

Style3[OneLeft]

Style3[OneRight]

Style4

Style5

Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 16 [La cena familiar de fin de año]

Por Eugenia de Chitzoff (*)
Muy pero muy buenas noches mis queridos estudiantes. Por fin llego la última clase de cómo comportarse en un estadio o una cancha o ese terreno baldío o lo que su equipo tenga para jugar al balompié. Esta es la última lección del año, todavía falta varios años más (NdeR: currar varios años más con esto) para que usted tenga el título de “Licenciado en ceremonial, protocolo y comportamiento como asistente en espectáculos futbolísticos”. Es un título que no tiene salida laboral pero al menos ese señor de amplio volumen que se encuentra a su lado en las gradas no lo matara viendo que usted tiene menos cancha que Robertito Funes Ugarte.

Este curso está orientado a aquellas personas de 15 años para arriba que dan sus primeros pasos en los tablones. Así como al sentarse en la mesa y no saber utilizar los cubiertos lo convierte en una persona inculta, el asistir a un encuentro de futbol y no saber cómo reaccionar ante determinados acontecimientos no lo hace inculto, si lo convierte en un pelotudo a cuadros, tal como se dice ahora.
Pero bien mi pupilo 2.0, hoy es la clase final y no lo voy a atosigar con material nuevo. Hoy no vamos a ver nada vinculante con el comportamiento en las gradas, si vamos a ver cómo puede comportarse al momento del brindis de fin de año en una familia futbolera. Porque como usted sabe, muchas familias respiran futbol hasta en las fiestas y es una buena ocasión para mostrarse que usted está empapado del conocimiento del folclore futbolero. Con algunos tips usted evitara que el tío alcohólico y putañero siga acusándolo de virgo en cuanto a futbol. Así que vamos con el título:

COMO COMPORTARSE EN LA CENA FAMILIAR
DE FIN DE AÑO.

Antes que nada cerciórese bien que en su familia haya futboleros, porque no es lo mismo hablar y chicanear con varios hombres y/o mujeres que sepan de futbol a discutir con su tía solterona o con sus primas de ocho años que solo quieren que One Direction venga a la Argentina. 

Una vez salteado ese inconveniente, le aconsejo utilizar estas construcciones al momento del brindis:

Antes de realizar estas construcciones primero fíjese que el equipo del que usted es hincha, haya ganado algo. No importa si gano algún torneo amistoso por 1919 contra ALUMNI, el tema es que haya ganado algo. Tenga en cuenta también que no debe ponerse cargoso, claro si es que no quiere que lo maten a piñas como lo hizo Zandoná con Edmundo.  Tampoco se convierta en un termo, tire estas frases con soltura y solo una de vez en cuando, no queremos que se transforme en un potencial “Turco” Alaluf tampoco. Bueno mis queridos alumnos, esta ha sido la última lección. La postrera gota de agua en el vaso del saber futbolero. Espero que disfrute de sus vacaciones, nos volveremos a ver el año que viene, chin, chin. Feliz año nuevo.

Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 15 [Ser Plateísta]

Por Eugenia de Chitzoff (*)
Muy buenas noches mí querido alumno del tablón del 2.0. Hoy vamos a retomar las clases, las clases de comportamiento. Recuerde, alumnado, que estas lecciones están enfocadas a aquellas personas que nunca han ido a la cancha, esos que nunca han ido y que ahora quieren  hacer “roncha”, como dicen ahora los jóvenes, yendo a la cancha. Básicamente este curos está enfocado, para que usted, que es un neófito en estos temas no se sienta abandonado a su impericia y sea visto como un completísimo pelotudo.

El tema de hoy es algo complejo, es una casta mal mirada y bien mirada. Hoy vamos a tocar su participación en un sector determinado. Ese sector donde están todos sentados y donde se paran para recibir al equipo o putear al resto de la humanidad. Hoy vamos a ver:

Ser Plateísta.
Muchas veces uno piensa en ir a la platea para buscar la calma y la protección que nos acobije de las inclemencias del tiempo, o bien para poder apoyar  nuestros cansados huesos en las derruidas butacas. Tal vez es momento en el que se busca ir con la familia y disfrutar de tan preciado momento futbolístico. Sin embargo estamos en un error. Si bien la platea es un reducto donde hay cierta paz, esa paz es momentánea. Usted, mi querido pupilo, encontrara en dicho sector del estadio con los personajes variopintos. Generalmente son de una edad madura, otros en familia. Todo indica que la calma reinara. Los mayores improperios e insultos más hirientes se han proferido desde la desde las butacas de la platea. La tripulación de un barco pirata ruso, al lado de la verba de un plateísta es la de la hermana Bernarda batiendo un flan. A la mayoría de los plateístas, no quiero generalizar, generalizar es malo, pero todo lo que se mueva en el verde césped es motivo de insulto.

Hay veces, y sobrados son los casos, donde la mismísima platea es más conflictiva que la propia barra brava. En ocasiones, su peligrosidad es superior al cuerpo de infantería de Ruanda. Y hay veces que reacciona peor que un hijo entre Fernando Iglesias y Raul Rizzo. Tal como le dije, muchos plateísta no suelen ser así, pero son excepciones a la regla. Durante siglos, este asiduo asistente a estas tribunas con butacas se ha ganado el mote de gruñón, taciturno y recontra puteador. Por excelencia el plateísta odia a todos, el universo entero es su enemigo. La raza humana es la culpable de que el equipo no gane, no juegue bien, de su artrosis, de su calvicie… de todo bah.  El plateísta no canta, muchos si lo hacen, pero para la popular se plateísta es ser sinónimo de mudo. Una denostación a este simpático concurrente en los ámbitos laborales es: “Pero cállate, plateísta”. Como si uno no hubiese ido a la cancha. La construcción de un plateísta en el imaginario popular es siempre el mismo: un plateísta los días de semana labura en una oficina o es jubilado, es propietario de una Renault 12 familiar y siempre viste pantalones grises o marrones si hay alguna festividad.

Las construcciones de las puteadas de muchos plateístas son distintas a la de la popular. El plateísta si bien es una ametralladora de improperios, muchas veces utiliza la creatividad para explayar su verba inflamada. El insulto siempre es vocalizado con salpicaduras de saliva mientras el plateista mira un punto fijo como poseído. En el siguiente cuadro vamos a ver que cosas son los que sacan de las casillas a los plateistas.


Bueno, esto ha sido todo por hoy. Trate de practicar, no le digo que en la calle porque podrían apalearlo por pelotudo, tampoco en la facultad si no quiere que el decano le haga un tatuaje en el ojete con su suela. Tampoco en el trabajo, con lo que cuesta conseguir uno hoy en día. Pero practique, que esto no se logra solo. Nos vemos la próxima clase, saluditos.

(*) No confundir con Eugenia de Chikoff, esta es Eugenia de Chitzoff. Y no sea botarate, esto no es en serio. 

Lecciones anteriores (click sobre el titulo):

    Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 14 [El ídolo]

    Por Eugenia de Chitzoff (*)
    Muy buenas noches mis queridos pupilos 2.0, damos comienzo nuevamente aotra clas de comportamiento dentro de las gradas viendo ese noble deporte llamado fútbol. Porque en esta amada disciplina, no solo es sentarse a mirar el cotejo y ver la pelotita pasar. Es también pertenecer al selecto grupo de viejos puteadores, de gordos empapados en sudor y de gente que brama y vocifera como un camionero brasilero. Como siempre le recuerdo: Ustedes estimados colegiales me preguntaran para que sirven estas pequeñas lecciones. Déjeme decirle  a usted, pequeño gurrumín ignaro de tablón, que sirve para que no haga el ridículo frente a hinchas ya avezados en las tribunas. Con estas enseñanzas usted quedara como un profesional del improperio y de la gestualidad corporal.. Hoy vamos a tratar a una figura cuasi paternal que ha adoptado el hincha:

    El ídolo.
    Esta figura del guerrero que siempre defenderá nuestros colores con la vida, dejando de lado el dinero, la familia y las amistades para molerse a palos con el mismísimo satanás en pos de la defensa del estandarte del equipo. La condición de ídolo es única, y así como es única, también son los requisitos que ha ganado el susodicho. Un jugador puede ser ídolo por cualquier cosa, es algo completamente subjetivo de cada equipo, sin embargo vamos a enumerar una serie de requisitos que ha cumplido el jugador para ser bendecido por la hinchada como tal. Un ídolo puede ser por:

    click sobre el cuadro para agrandar.
    Estas son solo algunas de las clases de ídolos que tenemos en el fútbol argentino, hay más por supuesto mi querido alumno, en este cuadro usted vera que puede pedírsele al ídolo y que no, como para no quedar como un boludo.

    Bueno, esto ha sido todo por hoy. Trate de practicar, no le digo que en casa porque su madre le puede llegar a revolear un florero por la cabeza, tampoco lo haga en el Colegio puesto que podrían  amonestarlo… no sé si siguen habiendo amonestaciones, pero por las dudas no lo haga. Tampoco en el trabajo, con lo que cuesta conseguir uno hoy en día. Pero practique, que esto no se logra solo. Nos vemos la próxima clase, saluditos.

    (*) No confundir con Eugenia de Chikoff, esta es Eugenia de Chitzoff. Y no sea botarate, esto no es en serio. 

    Lecciones anteriores (click sobre el titulo):











    LECCIÓN 12 [Diferencias de lo cobrado]
    LECCIÓN 13 [ANDA A LA CANCHA BOBO]

    Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 13 [Anda a la cancha, bobo]

    Por Eugenia de Chitzoff (*)
    Muy pero muy buenas noches, bienvenidos nuevamente a esta invasión de conocimiento que son estas clases de cómo comportarse en la cancha. ¿Cómo le va estimado alumno? Espero que siga ahondando en esta profundidad de conocimiento futbolero a fin de dejar de ser un mero principiante para convertirse en un letrado profesional del tablón. 
    Hasta aquí hemos visto y desarrollado material dentro de los estadios, de eso se trata, de darle conocimiento para que no quede como un completísimo pelotudo frente a sus amigos y/o conocidos y/u otros hinchas. Por eso esta clase es distinta, usted ya habrá visto que el titulo dice “anda a la cancha bobo”, si usted es medianamente inteligente ya se imaginara sobre lo que trata la cuestión, pero si tiene el mismo coeficiente intelectual que los panelistas de “No todo pasa”, le explico: esta lección versa sobre…

    NO IR A LA CANCHA.

    Muchas veces uno no va a la cancha porque tiene una agenda compleja. O bien los horarios de los cotejos son una completísima garcha por culpa de los chupavergas de la AFA. Bien, el hincha, el cabezoide promedio termisticus, piensa que uno debe ir a la cancha en todo momento, sino no se lo considerara hincha. Debe ir a alentar bajo toda circunstancia, a saber. No importa si llueve, caen pijas, es un martes a las 14 horas y usted trabaja, si usted es médico y tiene una guardia, si vive en otro país, si es Simba y recién le han matado a su padre mufasa, si justo ese día se casa. Nada importa, usted debe estar parado en las gradas sea la hora que sea, bajo cualquier circunstancia simplemente porque es su única obligación para con el club.

    Sin embargo, hay veces que uno esta recontrahiper hinchado las pelotas de ver a ese equipo de mierda perdiendo y perdiendo todo el putísimo campeonato o no pago la cuota, o no le alcanza para la entrada, o bien uno tiene algo importante que hacer como pegarse una buena rascada de pelotas en lugar de tomarse 6 bondis para ir a esa cancha mugrienta y sufrir el cacheo e intolerancia policial. Entonces usted faltara y es ahí, mi querido alumno, que yo lo ayudare con las excusas y como deberá comportarse para que no lo tilden injustamente de “poco hincha” o “pecho frio”. Quedan excluidos por supuesto, aquellas personas que vivan a más de 70 kilómetros de la cancha, aquellos que trabajen.



    Bueno, esta ha sido la clase del día de la fecha. Igualmente yo le sugiero ir a la cancha, vea a sus amigos, descárguese, si total pierden siempre, con que vea perder a su equipo otra vez no pasa nada. Pero bien, si no puede, estas son las opciones que le aconsejo seguir. Nos vemos la próxima jornada. Chaucito.
    (*) No confundir con Eugenia de Chikoff, esta es Eugenia de Chitzoff. Y no sea botarate, esto no es en serio. 

    Lecciones anteriores (click sobre el titulo):











    LECCIÓN 12 [Diferencias de lo cobrado]

    Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 12 [Diferencias entre lo cobrado]

    Por Eugenia de Chitzoff (*)
    Hola. Hola. Hola. Muy buenas noches mí querido alumnado. Ya pasaron las vacaciones de invierno, las cuales espero que para su beneplácito las hayan disfrutado. Pero bien, la holganza termina y ya estamos de vuelta en clases. Espero que durante este receso haya podido practicar algunas de estas enseñanzas. Bien, manso a la obra. Hoy vamos a hacer un pequeño ejercicio, vamos a ver las diferencias entre distintos aspectos del juego aplicados a los fallos arbitrales…

    DIFERENCIAS ENTRE LO COBRADO EN CONTRA Y A FAVOR.

    La clase del día de la fecha, nos aboca a tratar un tema álgido. Porque más allá de que el colegiado cobre algo completamente legal y fehaciente, usted jamás le dará la razón. Así es mi querido alumno. Si un defensor suyo lo agarra a tiros en el corazón del área al delantero rival a la vista de todos, es un claro penal. Ya lo sabemos. Pero si usted dice en plena tribuna que dicha pena fue bien cobrada, correrá el serio peligro de ser empalado por el paravalanchas por todos esos talibanes que dicen ser hinchas de su equipo pero que van a descargar su frustración mundana. Bien, el objeto de esto es negar todo lo cobrado por el árbitro, a menos claro que dicho colegiado nos cobre a favor. Es decir, si el referí nos cobra un penal que no fue tal, porque nuestro delantero se cayó dos metros antes de entrar al área o por “X” motivo. El árbitro será ecuánime, objetivo, equitativo e imparcial. JAMÁS pero JAMÁS diga que dicho árbitro los está beneficiando, porque también terminaran por tirar todos los papelitos de la cancha dentro de su recto. A fin de un mejor desarrollo y compresión, le pido que lo vea antes de concurrir al estadio.



    Bien, esas tan solo son algunas de las diferencias que existe. Hay de todo, son infinitas. Pero estas le sirven a modo de guía. Tenga en cuenta que esto funciona en lo que comúnmente se denomina “popular”, en la platea usted puede hacer lo que se le plazca, ya que en dicho lugar se putea si hay penal a favor, en contra o el árbitro se ata los cordones.  Igualmente trate de ver usted cómo comportarse, no se comporte como un pelotudo, tal como dicen ahora los jóvenes. Bueno, nos vemos en la próxima clase. 

    (*) No confundir con Eugenia de Chikoff, esta es Eugenia de Chitzoff. Y no sea botarate, esto no es en serio. 

    Lecciones anteriores (click sobre el titulo):

    Cómo comportarse dentro de una cancha. Lección 11 [Sobrellevando el receso. Segunda parte]

    Por Eugenia de Chitzoff (*)
    Buenas noches mis queridos alumnos. Estamos en el receso invernal por vacaciones, tampoco hay fútbol, ese deporte tan noble que hace que nos unamos en esta clase virtual. Y el futbolero de Ley, extraña el futbol, le falta algo. Siente un instinto de querer pararse en el sofá y empezar a cantar, a insultar, vociferar, a pedirle a ese tres inmundo y lento que deje de reptar como una babosa aplastada por un borceguí del ejército prusiano,  y a hacer todo ese ritual que usted realiza en las gradas de los distintos estadios. Es natural, esto es porque usted es un enfermo mental que carece de sentido psíquico estable y que tiene que vivir a través de un deporte, pero bueno, bueno, eso lo dejamos para el psicólogo, el psicólogo, ese al que usted odia y dice que es como el comentarista, que le pagan al pedo para escuchar pelotudeces y hacer una análisis de mierda cuyos resultados ya todos saben, porque usted nada puede separar del futbol porque es, como dicen ahora en la calle, un completísimo PELOTUDO.

    Pero bien mi querido pupilo, estamos aquí para aprender juntos a “encontrar” juntos la solución a estos problemas. Hoy voy a ser un poco su psicóloga, para llevarlo de la mano al sabio camino del aprendizaje y ver cómo podemos no caer en la tentación de futbolizar todo lo que veamos. Por ejemplo, el onanista por ejemplo no puede escuchar determinadas cosas porque enseguida va y acogota la nutria en un subibaja manual. Usted, mi querido alumno, es prácticamente igual pero con el fútbol.

    Les voy a dar algunas situaciones:

    Espero que esta guía le sirva para no realizar actos y acciones tendientes a la pelotudez extrema, recuerde que estamos sin fútbol porque los equipos se rearman, hacen pretemporada y se ponen bien para afrontar nuevos desafíos y por sobre todo para aguantar a un pelotudazo como usted. Si aún no puede comprender y aguantar que el fútbol vuelve en un rato, hágase un guiso con Valium y Clonazepam. Nos veremos en la próxima entrega.

    (*) No confundir con Eugenia de Chikoff, esta es Eugenia de Chitzoff. Y no sea botarate, esto no es en serio. 

    Lecciones anteriores (click sobre el titulo):

    Top